domingo, 17 de abril de 2011


TE AMO. Dos simples palabras que dichas son tan poco, pero a la vez tanto... dos simples palabras que si se dicen con falsedad pueden hacer tan mal, dos simples palabras que a veces son tan difíciles de decir, dos palabras que todos queremos escuchar de esa persona tan esperada... dos palabras que en la vida son todo. 


Reírse es arriesgarse a parecer tonto.
Llorar es arriesgarse a parecer sentimental.
Mostrar los sentimientos propios es arriesgarse a mostrarse uno mismo.
Exponer tus ideas o tus sueños ante una multitud es arriesgarte a perderlos.
Amar es arriesgarse a no ser correspondido.
Tener esperanzas es arriesgarse a no conseguirlas.
Pero se tienen que correr riesgos…
Por que el mayor peligro en la vida es no arriesgar nada.



No ha dormido esta noche pero no esta cansada
No mira ningún espejo pero se siente toda guapa

Hoy ella se ha puesto color en las pestañas
Hoy le gusta su sonrisa, no se siente una extraña
Hoy sueña lo que quiere sin preocuparse por nadaHoy es una mujer que se da cuenta de su alma
Hoy vas a descubrir que el mundo es solo para ti
Que nadie puede hacerte daño
Hoy vas a comprender que el miedo se puede romper con un solo portazo
Hoy vas a hacer reír,  porque tus ojos se han cansado de ser llanto
Hoy vas a conseguir reírte hasta de ti y ver que lo has logrado
Hoy vas a ser la mujer que te dé la gana de ser
Hoy te vas a querer como nadie te supo querer
Hoy vas a mirar para delante
Que para atrás ya te dolió bastante
Una mujer valiente, una mujer sonriente!


Si no te aguantas las respuestas sarcásticas, No hagas preguntas estúpidas -.-




El chico enamorado te llama Bonita en lugar de sexi. Te llama por teléfono aunque hayan colgado hace 2 minutos. Se queda despierto solo para verte dormir. Besa tu frente. No tiene vergüenza de como sos. Te toma la mano frente a sus amigos. Nunca te miente. Te hace soñar hasta con los ojos abiertos...


Las cosas buenas hay que saber esperarlas. No hay nada de malo en que las cosas que uno desea lleguen más tarde de lo esperado. Cuando lo que querés tarda en llegar, el deseo crece, se fortalece. Y ahí tu corazón se prepara para recibir eso que tanto esperás. Si no estás listo para lo que deseas, es como comer una frutilla verde, es amarga, no la disfrutas. Hay cosas que llegan más tarde de lo esperado, y eso te da ansiedad, frustración, pero por algo es eso. Por algo hay cosas que se hacen esperar. Cuando menos las esperas, quizá cuando ya renunciaste a alcanzar ese deseo, es cuando la vida, el destino, lo que sea te sorprende. Y esas sorpresas son las que más se disfrutan, las que llegan cuando menos las esperas.
Las cosas buenas llegan tarde, dan trabajo, esfuerzo, dedicación. Cuando uno sabe que lo que viene es bueno, la espera no es una agonía, es una fiesta. 
Saber esperar es saber desear. Queremos todo ya, la comida ya, los resultados ya, levantar el tubo del teléfono y que venga un delivery y te traiga la felicidad, ahora. 
El deseo se vuelve más fuerte cuando uno se toma el tiempo de desear. Si entre el deseo y la realización no hay tiempo, el deseo se vuelve débil, descartable. Así que será hoy, mañana, en un tiempo, en el momento exacto, más tarde de lo esperado, pero eso es muy bueno.


¿Alguna vez sentiste que te equivocaste con alguien? ¿Qué dejaste pasar la oportunidad? El momento se fue, el tiempo pasó, ya no está ahí. Y meses, años. Seguramente el interés se fue, las ganas, el calor. Dicen que si tiene que ser va a ser. Pero claro, tal vez tenía que ser y no fue. Y ahora tal vez ya no será. También dicen que las oportunidades pasan una vez. Quien sabe. Igual, uno no puede dejar de preguntarse. ¿Y si…?

No hay comentarios:

Publicar un comentario