viernes, 13 de mayo de 2011


Mientras más aclarás, más te enredás,
mientras más vueltas le das,
más cuadrado lo ves,
mientras más preguntas hacés,
más te aturden las respuestas.

La inspiración es medio histérica, tiene formas raras de aparecer.

Tenemos la mala costumbre de perder el tiempo. Como si estuviéramos esperando a que por arte de magia venga alguien o algo que te lo haga pasar mejor de lo que te lo estas pasando en ese mismo momento. Es algo que hacemos e irremediablemente siempre vamos a hacer mal. Es como estar esperando toda tu vida a ese príncipe azul, sin pensar que también lo podemos pasar bien con el príncipe verde... amarillo... rojo... Pero en cambio, perdemos el dichoso tiempo en rompernos la cabeza buscando el momento y la situación perfecta, porque pensamos que algún día podremos decir ''SOY FELIZ'', y no somos capaces de apreciar que seguramente en este momento somos felices, o simplemente estamos bien. No hay que pensar en lo que ocurrirá mañana, o incluso en lo que ocurrió ayer, simplemente, deberíamos dedicar el preciado tiempo del que disponemos, para pensar en el presente y vivir el momento.

Sonríe, se feliz, no dejes que nadie te pase por encima. Ríete, disfruta, no tienes la edad suficiente como para permitir aburrirte. Haz mil locuras, enamórate. Equivócate, cáete mil veces en el mismo lugar, date el permiso de descubrir el mundo. Siente esa paródica alegría de oponerte ante el resto y si es lo que te apetece haz exacto lo incorrecto. Sal corriendo y grita al mismo tiempo,
por que la vida es caer y levantarse y volverse a caer y levantarse otras mil veces, es alegrarte los viernes y joderte los lunes, abrazarte a quien te abrace y a quien no te quiera que no te quiera y punto.
Pd: pasado aparcado, presente nuevo, futuro a la vista.


Deseos.

Deseos. ¿Para qué desear? Está bien intentar alcanzarlos pero, ¿y cuándo no lo hacemos? ¿Merece la pena toda esa frustración, esa sensación de fracaso? Tal vez sí, tal vez no. No es lo mismo desear algo material, que nos proporciona un placer efímero, a algo sentimental, que también puede serlo pero, ¿y si no lo es? ¿Y si conseguimos una felicidad casi eterna?



Hoy aprendí que ser feliz no es vivir sin problemas, sino tenerlos y sobrevivir con ellos... Superarlos, ignorarlos. Ya no me importa nada. Voy a vivir como pueda y quiera, voy a aprovechar cada oportunidad que se me de, y eso me va a hacer mucho más feliz de lo que hoy soy...

Trastorno bipolar es mi enfermedad, 
muchos no conocen mi doble personalidad. 
Tengo problemas psicológicos en realidad…

Se inteligente:
perdona, olvida
y sé feliz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario